Cuidado si te haces las uñas semipermanentes y estás embarazada: los expertos avisan del riesgo

Aunque las uñas semipermanentes son populares por mantener las manos bien cuidadas por varias semanas, es importante tomar precauciones especiales durante la gestación. Expertos en salud advierten sobre posibles reacciones alérgicas e infecciones en la piel debido a los cambios que experimenta el sistema inmunológico en este período.

¿Qué son las uñas semipermanentes?

Este tipo de esmaltado consiste en aplicar múltiples capas sobre la uña natural que se endurecen con lámparas de luz ultravioleta o LED. El proceso incluye:

• Preparación de la uña natural mediante limado y deshidratación
• Aplicación de base, color y capa final
• Secado de cada capa bajo luz UV/LED
• Eliminación de residuos adhesivos

Componentes químicos a considerar

Los productos semipermanentes contienen diversas sustancias como metacrilatos, formaldehído y tolueno, junto con pigmentos y resinas. Los especialistas señalan que estos compuestos podrían absorberse a través de la uña o piel circundante.

Exposición a luz UV

La sensibilidad cutánea aumenta durante el embarazo debido a cambios hormonales, lo que hace que la exposición repetida a lámparas ultravioleta pueda generar irritaciones o respuestas alérgicas.

Recomendaciones para cuidados seguros

• Optar por alternativas menos agresivas
• Reducir la frecuencia de aplicación
• Consultar con profesionales de la salud
• Elegir espacios bien ventilados para los tratamientos

Cambios en las uñas durante la gestación

Las fluctuaciones hormonales afectan la textura, crecimiento y fortaleza de las uñas. Es común observar:

• Aumento en la fragilidad ungueal
• Mayor sensibilidad a tratamientos químicos
• Alteraciones en la cutícula
• Modificaciones en la circulación y absorción de nutrientes

Regulación europea sobre componentes

La Unión Europea ha establecido la prohibición de ciertos compuestos en esmaltes semipermanentes a partir de septiembre de 2025. Esta medida afecta específicamente sustancias identificadas como potencialmente perjudiciales para la reproducción y con posibles efectos carcinógenos.

La normativa establece que tras esta fecha no se permitirá la fabricación, importación, comercialización ni uso de productos que contengan estos componentes, sin períodos de transición o venta de existencias.